sábado, 30 de enero de 2010

Consultas sobre violencia doméstica





Oficina de Violencia Doméstica,
de la Corte Suprema de Justicia de la Nación,
de la Ciudad de Buenos Aires.


Atención: las 24 horas del día todos los días del año
(fines de semana y feriados incluidos)
Dirección: Lavalle 1250, Planta Baja, Ciudad de Buenos Aires.
Teléfonos: 4370-4600 internos 4510 al 4514 .
Correo Electrónico: ovd@csjn.gov.ar.



jueves, 28 de enero de 2010

El mito de la culpa




Frase hecha:


"Si una mujer sufre violencia, la culpa es suya por seguir conviviendo con ese hombre"


Esta frase es falsa porque una mujer abusada es víctima y no victimario. Una mujer resuelve seguir conviviendo con su maltratador por múltiples razones y es imprescindible ahondar en el tema y no banalizar la situación.

Posibles causas que llevan a una mujer a soportar una situación de violencia:

- Tener la seguridad de que su pareja no quiere hacerle daño, que en el fondo la quiere y que ella puede cambiarlo.

- Creer que ella es responsable del maltrato, que lo provoca con su comportamiento, que si se porta "bien", él no la maltratará.

- Creer que no es capaz de subsistir (emocional y económicamente) sin su pareja.

- Temer que si se separa los malos tratos se agravarán.

- Vergüenza a hacer pública su situación de maltrato.




viernes, 15 de enero de 2010

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domingo, 10 de enero de 2010

Dominación y victoria


Según un informe de la OMS cada 18 segundos una mujer es maltratada y, al menos una de cada cinco mujeres, sufre malos tratos en sus hogares, que no siempre son estrictamente físicos, pero si bestiales.

Muchos hombres fueron educados para alcanzar estatus, riqueza y poder, a como de lugar y la mujer suele ser a veces su trampolín para lograrlo, la demostración pública de su capacidad de dominar su entorno y salir adelante.

Cuando por cualquier motivo no consiguen alcanzar los objetivos que se proponen, suelen sublimar sus frustraciones ejerciendo la mas cruel de las tiranías dentro de su ámbito doméstico, o sea, sobre su mujer y sus hijos.





Empotrada





Contra la pared terminan los golpes físicos,
los otros golpes son más difíciles de superar.
Vuelven a pesar del tiempo
y la distancia.